Esta vez no del blog, sino mío, pues ayer cumplí 29 años (ya me acusan de estar viejo, jajaja...). Fue mi segundo cumpleaños en Japón y fue casi un día normal.
En la mañana fui al laboratorio y vi el juego final entre Japón y Corea y en la tarde me fui a caminar un poco en Shibuya. La noche ya fue diferente pues me encontré con amigos y nos fuimos a beber cervezas y comer pizzas a un pub irlandés donde por supuesto no paraban de poner en las pantallas el juego final del 2do Clásico Mundial de Béisbol.
La nota discordante fue que no pude llegar a tiempo para el último tren en Chuo-Rinkan y tuve que caminar hasta la casa (por suerte solo una estación).
En la mañana fui al laboratorio y vi el juego final entre Japón y Corea y en la tarde me fui a caminar un poco en Shibuya. La noche ya fue diferente pues me encontré con amigos y nos fuimos a beber cervezas y comer pizzas a un pub irlandés donde por supuesto no paraban de poner en las pantallas el juego final del 2do Clásico Mundial de Béisbol.
La nota discordante fue que no pude llegar a tiempo para el último tren en Chuo-Rinkan y tuve que caminar hasta la casa (por suerte solo una estación).
Quiero darle una vez más las gracias a todos los que me felicitaron por una vía u otra (correo electrónico, FaceBook, etc.), en especial a estos tres que compartieron un pedacito de mi día haciéndolo más pasadero y decirles a todos que no me siento viejo para nada, jajaja...