jueves, 14 de febrero de 2008

Reencuentro telefónico

Anoche no dormí prácticamente nada pero fue gracias a un feliz reencuentro telefónico. Luego de 12 años (se escribe mucho más fácil de lo son realmente 12 años) pude conversar otra vez con mi "familia" española. Mi "familia" española fue aquella que me acogió en su casa durante un mes en el verano de 1995 en Santiago de Compostela. Yo era parte de una delegación de intercambio cultural entre niños cubanos y españoles y la pasé de maravillas, gracias en gran medida a ellos.

Una vez de regreso a Cuba continuamos la comunicación a través del correo postal durante 5 años más aproximadamente pero luego por un motivo u otro perdimos todo contacto. Desde que llegué a Tokyo estaba por hacer contacto pero solo ahora pude gracias a la ayuda de un amigo español que vive por acá también.

Lo menos que ellos se imaginaban era que fuese yo el que los estubiera llamando y de vez en cuando me preguntaban si realmente era yo el que estaba hablando pues todavía no lo podían creer, jajaja. Si, fui yo, solo que 12 años mayor, con una voz más aguda, algunos centímetros de altura y librillas de más, y muchas experiencias y sueños que en aquel momento ni pensaba tener nunca, pero en escencia yo mismo.

Fue muy interesante y cómico también intercambiar hechos que han pasado y enterarme someramente como se han desarrollado sus vidas en estos años. La familia ha ido creciendo, nuevos miembros, graduaciones, mudanzas, viajes, trabajos que vienen y van, jajaja, en fin, de todo. Pude hablar con todos los miembros en diferentes momentos, casas y localidades.

Ellos también me preguntaron muchas cosas y tube que contarles mi vida igual, graduado, casado, mudado (primero para Ciego de Ávila y ahora para Tokyo, jajaja). Resumiendo que tanto a ellos como a mí, nos dio tremenda alegría conversar de nuevo. Pienso no volver a perder la comunicación.

Saludos desde esta parte del mundo para mi familia española